El abrazo de la serpiente

No soy muy fanático del cine colombiano. Le he dado varias oportunidades y siempre he terminado decepcionado. No sé si son mis pésimas elecciones a la hora de escoger qué cinta voy a ver, o si en efecto, el cine nacional es un bodrio. Estaba convencido de eso hasta que tuve la oportunidad de ver “El abrazo de la serpiente”, una película que ha marcado un hito dentro de la industria audiovisual, ya que es la primera película nominada a los premios de la academia en la categoría “Mejor película de habla no inglesa”. Sin duda, una cinta impresionante que logra mover las fibras más profundas del ser.

La historia se sumerge en el corazón del Amazonas, donde existe una lucha de culturas, por una parte, los indígenas, y por otra, los extranjeros que lo único que desean es apoderarse de sus riquezas y explotar los recursos naturales de la región, entre ellos, el más codiciado: el caucho. Claramente se evidencia en la película el colonialismo brutal que se imponía, la evangelización y la intención de exterminar un pueblo.

El director Ciro Guerra, quien ha sido el responsable de otras joyas del cine colombiano como “La sombra del caminante” y “Los viajes del tiempo”, pretende dejarnos una reflexión acerca de las secuelas que ha dejado esta época, de las cicatrices que aún permanecen ahí, de ese pueblo que nosotros mismos nos hemos encargado de ignorar. “El abrazo de la serpiente” es un llamado a reconocer nuestro patrimonio, es una cápsula para la memoria, un grito desesperado que aún se oye en los lugares más recónditos de la tierra colombiana.

En cuanto a la producción, debo decir que se pensó muy bien en cada detalle, que hace de la cinta un producto casi impecable, magistral. Se aprovecha de muy buena manera el formato a blanco y negro, haciendo que la audiencia use su imaginación para pintar los paisajes, los escenarios, las situaciones. Este formato monocromático juega perfectamente con los sonidos de ambientación, dándole un toque místico que ayuda a que el espectador se sumerja en la historia, casi que uno puede sentir el río, el viento, las hojas de los árboles, la vida misma de la selva. Las tomas son un poco extensas y aunque a veces llegan a ser un poco repetitivas y monótonas, logran momentos de reflexión e incertidumbre.

Un elemento importante para destacar es que la mayoría de los actores son indígenas propios de la región. El esfuerzo tan grande para lograr hacerlos ver tan naturales ante una cámara es digno de reconocimiento. Además, la película en su mayoría esta hablada en lenguas nativas, con diálogos cortos pero cargados de emotividad.

Aún no me quedan claros algunas piezas de la cinta, estoy seguro que es necesario ver esta película varias veces para entenderla por completo, la historia y las anécdotas que allí se muestran son difíciles de digerir la primera vez.

En cuanto al guion, me parece muy buena la idea de haberse basado en los diarios de Theodor Koch y Richard Evans, dos extranjeros que estuvieron en el Amazonas hace varios años. Aunque el guion se vale de varias anécdotas y experiencias registradas en las páginas de los diarios, la historia cuenta con un poco de ficción, lo cual le da un aire místico con elementos irreales contrastados con momentos históricos.

La narrativa de “El abrazo de la serpiente” es lenta pero fluida. Existen momentos sutiles que en un momento inesperado explotan en una serie de sucesos que sorprenden al espectador. Además, la historia está fragmentada, ya que se desenvuelve en diferentes momentos. La cinta nos lleva a un viaje al pasado, presente y futuro, desde las raíces hasta el exterminio.

“El Abrazo de la serpiente” puede tener diferentes miradas, por una parte, podemos evidenciar la pérdida de tradiciones de los pueblos indígenas, a causa de que cada día son comunidades más invisibilizadas y poco reconocidas; el respeto que debemos tener con nuestra naturaleza, con los recursos naturales, que no tienen precio. Me parece que este último enfoque se adapta mucho al momento coyuntural en el que estamos viviendo, ya que el gobierno está vendiendo lo que es del pueblo y no le está dando prioridad a los temas del medio ambiente; también nos habla de la forma en que al igual que los indígenas de la película, estamos siendo sometidos por “el hombre blanco”.

Para terminar, creo que es una pieza valiosísima dentro del cine nacional. Una película que se sale de los esquemas y las formas de hacer cine en el país. Es una historia que hipnotiza, que lo sumerge dentro de la majestuosa selva amazónica, que deja una reflexión acerca de lo que hemos hecho con lo nuestro, nos hace descubrir esa cara que siempre habíamos ignorado. Sin duda, una muestra de que sí es posible hacer cine diferente al que estábamos habituados, con diálogos predecibles, siempre explotando los estereotipos y las situaciones coloquiales. “El abrazo de la serpiente” es una película que aunque no ha ganado el premio Oscar, se ha ganado un lugar privilegiado dentro del cine colombiano contemporáneo.